jueves, 25 de junio de 2009

Un hombre que no se debe querer

Huyo de ti resignada
sabiendo que volverte a tener
acto suicida sería,
despiertas en mí el amor
lo absorbes, y me dejas vacía.

Y no fuiste tú, si no yo,
quien perdió el juego
quien se enamoró
quien debe marcharse
y acostumbrarse a extrañar.

Me llevo este amor callado
a cantarlo y a llorarlo,
y me llevo tus hombros encogidos
nada más tuyo me llevo
pues nada más he hallado.

No hay comentarios: